¿En qué consiste el tratamiento?
Se aplican pequeñas inyecciones de toxina botulínica en las zonas afectadas, como las axilas, palmas de las manos o plantas de los pies. La toxina bloquea la liberación de acetilcolina, el neurotransmisor que provoca la sudoración, ofreciendo una solución duradera y eficaz.
Beneficios
Reducción de la sudoración en las zonas tratadas.
Resultados duraderos: Los efectos duran entre 5 y 7 meses.
Mejora la calidad de vida: Evita las molestias y la incomodidad de la sudoración excesiva.
¿Por qué elegir este tratamiento?
Eficaz y comprobado: Uno de los tratamientos más efectivos y rápidos.
No invasivo: Procedimiento sencillo sin necesidad de cirugía.
Sin tiempo de recuperación: Podés retomar tus actividades diarias inmediatamente.
El tratamiento está indicado para personas que padecen hiperhidrosis primaria, especialmente en las axilas o palmas y plantas.